ASÍ NO

Ricardo, El Mundo, 16 de junio de 2011

Así no puede ser. La irracionalidad no puede sustituir a una indignación verdadera y profunda, la indignación que implica previamente saber qué es la dignidad.

La democracia es el mayor tesoro que tenemos. Un tesoro frágil que estamos machacando. 

Las ciudades tienen que recobrar la normalidad, las amenazas tienen que terminar... y los políticos tienen que reaccionar a favor de la regeneración democrática, no a favor de conservar a toda costa su empleo.

Sigamos indignados pero con dignidad, exijamos a los políticos que escuchen la voz de los ciudadanos, al gobierno que gobierne y a los falsos indignados que cesen inmediatamente la coacción y la violencia.